La Fundación RACE considera inasumibles las cifras de siniestralidad vial en 2023, similares a las de 2022, y destaca el aumento de la mortalidad infantil y el alarmante incremento de los motoristas fallecidos.
TEXTO: JAVIER VARELA
La Fundación RACE sigue trabajando en conseguir reducir la siniestralidad y la mortalidad en las carreteras españolas. Por ello, lamenta y considera inasumible la cifra de fallecidos en las carreteras españolas durante el pasado año. En 2023 perdieron la vida en las carreteras españolas 1.145 personas (tres menos que en 2022) y otras 4.495 resultaron heridas graves, con un incremento del número de accidentes mortales, según las cifras publicadas por la DGT. La cifra supone un importante incremento respecto a 2019, año previo a la pandemia (1.098 fallecidos). En 2023 sólo hubo 25 días con cero fallecidos, cuatro días más que en el año anterior, y el promedio diario de fallecidos en carretera fue de 3,1.
Estos datos hacen que desde la Fundación RACE se reitere que resulta imprescindible adoptar una estrategia consensuada entre las organizaciones, asociaciones y administraciones que conforman el ecosistema de la movilidad y la seguridad vial para reducir estas cifras. Es cierto que el pasado año aumentaron un 2 por ciento los desplazamientos de largo recorrido (448,7 millones), que el parque de vehículos ha crecido un 1,7% (hay 36,6 millones) y que el censo de conductores se sitúa en 27,8 millones (un incremento del 0,4%), pero los problemas de la siniestralidad en la carretera van más allá.
Por todo ello, desde la Fundación RACE se vuelve a insistir en activar acciones efectivas de formación, información y concienciación para los automovilistas, motoristas y usuarios de la vía sobre las consecuencias de la no utilización de los elementos de seguridad, y del incumplimiento de las normas de movilidad y seguridad vial.
Falta de mantenimiento e inversión
La Fundación RACE considera que la falta de mantenimiento y la escasa inversión, especialmente en las carreteras convencionales, no ayuda a la reducción del número de fallecidos. De hecho, 849 persona perdieron la vida en este tipo de vías, lo que representa el 74% del total, 21 más respecto al año anterior. Además, cabe destacar los datos de siniestralidad por salidas de vía, causantes del 42% de fallecimientos. La falta de mantenimiento de este tipo de vías se suma al incremento de impuestos por el uso de las autopistas de peaje (que comenzó a aplicarse el 1 de enero), que provoca un mayor riesgo vial, ya que ‘obliga’ a muchos usuarios a buscar vías alternativas más peligrosas como las que conforman la red secundaria. Las malas cifras de siniestralidad han aumentado un 9% entre los usuarios vulnerables, situándose en 463, 38 más que el año anterior. Especialmente alarmante es la cifra de motoristas fallecidos, que se ha incrementado hasta alcanzar los 286, siendo el colectivo cuya siniestralidad es cada vez mayor desde hace más de una década. Por ello, la DGT obligará en 2024 a los motoristas a utilizar un casco integral o modular y unos guantes homologados cuando circulen por carretera.
Sin cinturón de seguridad
Aunque parezca increíble, el no uso del cinturón de seguridad sigue presente en la siniestralidad entre los ocupantes que viajaban en turismo y furgoneta. El pasado año, 138 de los fallecidos no llevaban el cinturón de seguridad puesto en el momento del accidente (142 el año anterior). De la misma forma, 9 ciclistas y 8 motoristas no llevaban casco en el momento del siniestro. Por otra parte, cabe destacar el incremento de la mortalidad infantil, que registró 22 fallecidos, la segunda mayor cifra desde 2014. Una situación que exige, como se hace desde la Fundación RACE, que se sigan llevado a cabo diferentes acciones de concienciación para los adultos sobre el uso correcto y la elección de un sistema de retención infantil que cubra las necesidades de cada niño según sus características físicas.
Medidas propuestas por la Fundación RACE
Desde la Fundación RACE se sigue proponiendo cuatro pilares fundamentales para reducir la siniestralidad vial en nuestras carreteras:
-
- Incrementar la inversión en vías convencionales.
- Potenciar el uso de las autovías y autopistas.
- Apostar por la formación y concienciación de los automovilistas.
- Incentivar la modernización del parque automovilístico, cuya media de edad ha aumentado hasta los 14 años.