La Tomatina de Buñol, el Descenso del Sella, el Cipotegato de Tarazona o la Romería Vikinga de Catoira son algunas de las celebraciones que llenan el mes estival por antonomasia
TEXTO: JAVIER VARELA
Agosto es el mes del calendario con más fiestas populares del año. El descenso del Sella, la Romería Vikinga de Catoira, las carreras de caballos de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), la Semana Grande de San Sebastián, el Misterio de Elche, la Aste Nagusia de Bilbao, el Cipotegato de Tarazona y la Tomatina de Buñol reúne a muchos turistas que buscan nuevas experiencias. Al menos una vez en la vida hay que vivir en directo alguna de estas fiestas.
El Descenso Internacional del Sella
Cada primer sábado de agosto -este año el día 3- atrona el ‘Asturias Patria Querida’ en la ribera del río Sella en Arriondas. Es el pistoletazo de salida del Descenso Internacional del Sella, de las piragüas, como se conoce popularmente a una de las fiestas más importantes de Asturias, Declarada de Interés Turístico Internacional. Cerca de un millar de piragüistas realizan el descenso y más de 100.000 asistentes disfrutan de esta fiesta de agua y de gastronomía, con mucha sidra y buenos manjares en la tradicional ‘espicha campestre’ a base de chorizos, empanadas, tortos, tortillas y ‘concejales’ (bacalao rebozado).
Los ‘selleros’ acuden con su chaleco, su collar de flores y la montera picona con la banda sonora de charangas, bandas de gaitas, sirenas, xanas, gigantes… Una vez que se da la salida a las 12 de la mañana, por el lado izquierdo del río un tren fluvial avanza con centenares de ‘selleros’ dando color al descenso y por el derecho, una hilera de coches y motos animan desde la carretera. La prueba deportiva consiste en recorrer la distancia que separa el puente sobre el río Sella en Arriondas, hasta el puente sobre el mismo río (ya la ría) en Ribadesella. Los participantes se dividen en varias categorías: piraguas Individuales K1, piraguas dobles o K2, canoas individuales o C1 y canoas dobles o C2.
Romería Vikinga de Catoira
Un drakkar vikingo de más de 17 metros llega a la costa gallega por la desembocadura del Ulla cargado de hombres y mujeres gritando, con las caras pintadas y armados hasta los dientes. No es un ataque vikingo, es la Romería Vikinga de Catoria en el que cada primer domingo de agosto -este año el día 4- los vecinos de este pueblo de Pontevedra rememoran cómo el ejército del rey vikingo Ulfo fueron rechazadas por tropas lideradas por el obispo Cresconio. Declarada de Interés Turístico Nacional en 1988 y de Interés Turístico Internacional en 2002, tiene su origen en 1960. En esta fiesta, el pueblo de 3.500 habitantes congrega a 25.000 visitantes que dan color a un municipio hermanado con la ciudad danesa de Frederikssund, una localidad de gran tradición vikinga.
Durante el fin de semana Catoria cuenta con varias actividades como un mercado medieval, obras teatrales vikingas, juegos populares, conciertos y la tradicional cena vikinga del sábado. El domingo arranca con un pasacalles que da paso al Desembarco Vikingo y la Defensa de las Torres del Oeste y que finaliza con una comida de confraternización en la que el pulpo, los mejillones, las empanadas y las sardinas son los protagonistas, con música de gaitas de fondo.
Carreras de caballos de Sanlúcar de Barrameda
La playa de Sanlúcar de Barrameda se convierte en un hipódromo natural en el que disfrutar de carreras de caballos al estilo inglés. Las carreras se mantienen desde 1845, lo que las convierten en una de las actividades ecuestres con mayor antigüedad en Europa. Aprovechando la bajamar de las tardes de agosto de las playas de Bajo de Guía y Las Piletas, los purasangres compiten ante la mirada de lugareños y turistas, con el Parque Natural de Doñana de fondo y el atardecer gaditano regalando postales. Fueron declaradas de Interés Turístico Internacional en 1997. Cuentan con dos ciclos, el primero los días 9, 10 y 11 de agosto y el segundo el 25, 26 y 27. Entre ellos se celebran las fiestas patronales de la Virgen de la Caridad en la que destacan las alfombras de sal de flores que forman coloridos mosaicos.
Las fechas de los ciclos obedecen al calendario de mareas, ya que los días de carreras tienen que coincidir con una buena bajamar para haya suficiente orilla para que corran los caballos. El espectáculo suele empezar sobre las seis y media de la tarde y concluye en torno a las nueve y media de la noche y más 30.000 personas disfrutan del momento. La Sociedad de Carreras de Caballos, que es la entidad organizadora de este evento, instalado un recinto en la línea de meta en el que se pueden realizar apuestas.
Semana Grande de San Sebastián
La Semana Grande de San Sebastián se celebra en la semana del 15 de agosto, día de la Asunción de la Virgen y comienza y termina en sábado (del 11 al 18). El nacimiento de estas fiestas se remonta a mediados del siglo XIX, cuando la ciudad abrió sus puertas al turismo como consecuencia de que la reina Isabel II eligiera la playa de La Concha para disfrutar de sus famosos y saludables baños de mar. Lo que comenzó como una actividad sanadora, se convirtió en una costumbre. La fiesta comienza, cada año, con el tradicional ‘cañonazo’, que se lanza desde Alderdi Eder, y la interpretación de la canción del Artillero. El mar está muy presente en estas fiestas con eventos como una regata de vela crucero por la bahía o la clásica travesía a nado desde Getaria hasta San Sebastián.
Una semana con muchas actividades como gigantes y cabezudos, toros de fuego, carreras de caballos, demostraciones de ‘herri-kirolak’ (deporte rural vasco) y torneos de voley en la playa de la Zurriola. Pero en estas fiestas, los fuegos artificiales son el plato fuerte todas las noches con el ‘Concurso Internacional de Fuegos Artificiales’ en la bahía de La Concha y en el que participan compañías procedentes de diversos puntos del mundo y que se celebra de forma ininterrumpida desde 1964.
Misterio de Elche
El Misterio de Elche, es un tesoro cultural del pueblo de Elche y una de las joyas más preciadas del patrimonio valenciano, como prueban su declaración como Monumento Nacional el año 1931, y su inclusión, en el año 2001, en la primera Proclamación de las Obras Maestras del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. La Festa, como también se conoce esta obra de origen medieval, se representa todos los años en la Basílica de Santa María de Elche en el mes de agosto, para celebrar la festividad de la Virgen de la Asunción. El día 14 se pone en escena la primera parte, denominada la Vespra y la segunda parte, la Festa, el día 15.
El acto sacro-lírico religioso podría tener su origen en torno a la segunda mitad del siglo XV recrea la Dormición, Asunción y Coronación de la Virgen María en la Basílica de Santa María. Ha sido representada sin interrupción a pesar de la prohibición de representar obras teatrales dentro de las iglesias como estableció el Concilio de Trento. El texto está escrito en valenciano antiguo, salvo algunos versos que están en latín y según cuenta la tradición, el libreto con este texto llegó en 1370 en un arca de madera junto con la imagen de la Virgen.
Aste Nagusia de Bilbao
Aste Nagusia es la fiesta excelencia de Bilbao, que se celebra todos los años entre el 17 y el 25 de agosto. Bilboko Konpartsak es desde 1978 la principal impulsora de estas fiestas que, junto con el Ayuntamiento de Bilbao y otros grupos representados en la comisión mixta de fiestas son los encargados de organizarla. Las fiestas comienzan con el lanzamiento del ‘Txupinazo’ y están protagonizadas por un personaje conocido como Marijaia, la mascota de las fiestas que realiza su entrada triunfal en el balcón del teatro. Son unos días de música, gastronomía y tradiciones, un escaparate de la cultura vasca con conciertos de música y danzas tradicionales o exhibiciones de corte de troncos y arrastre de piedras.
La gastronomía, como no podía ser de otra manera, también es protagonista en esta semana. Las calles se llenan de puestos de comida y bebida en los que es imposible no disfrutar de un buen pintxo un buen caldo. Los más pequeños también son protagonistas con gigantes y cabezudos y el ‘Gargantúa’ que los ‘devora’ para después liberarlos a través de un tobogán. Los fuegos artificiales se adueñan de la noche y la Semana Grande finaliza con la quema de la Marijaia mientras da un paseo por la ría a modo de despedida.
Cipotegato de Tarazona
El Cipotegato abre las Fiestas Generales de Tarazona en honor a San Atilano, que se celebran del 27 de agosto al 1 de septiembre, siendo el día de Fiesta Mayor el 28, conmemorándose el traslado de las reliquias del Santo a la Ciudad, en 1644. Este personaje, encarnado cada año por un vecino diferente elegido a través de un sorteo, va vestido con un traje similar al de un arlequín y es el objetivo del resto de vecinos que le lanzan tomates y todo tipo de verduras durante el trayecto que realiza por las calles de Tarazona. Al llegar de nuevo a la plaza consistorial, es alzado en el monumento a su figura y vitoreado por el pueblo. El Cipotegato de Tarazona fue declarado Fiesta de Interés Turístico Nacional mediante Resolución de la Secretaría de Estado de Turismo de 25 de mayo de 2009.
Se cree que esta curiosa celebración tiene su origen en los festejos organizados por las autoridades eclesiásticas durante los siglos XVI y XVII. Entonces, el Cipotegato (conocido como Pellexo de Gato) recorría las calles del pueblo por orden del Cabildo asustando a los niños antes del inicio de las procesiones. Los pequeños le arrojaban restos de verduras que habían quedado en el suelo de la plaza donde se había celebrado el mercado. Esta tradición se ha ido transformando con el paso de los años y después de la guerra civil, pasa a ser perseguido mientras le lanzaban restos de verduras y desde 74 es perseguido y zarandeado mientras le arrojan tomates. Aunque antes se veía como algo vejatorio y humillante para quien encarnaba al Cipotegato, ahora se considera un honor para la persona que lo ejerce.
Tomatina de Buñol
Si te gusta el tomate esta es tu fiesta. Más de 140.000 kilos de tomate, más de 20.000 personas y la libertad absoluta para lanzar tomates a diestro y siniestro. Así es la Tomatina de Buñol que se celebra el 28 de agosto. Todo comenzó en 1945, cuando durante el desfile de gigantes y cabezudos un grupo de chavales se intentaron hacer hueco entre la muchedumbre. Uno de ellos cayó al suelo y enfadado cogió tomates que había en el suelo y comenzó a lanzarlos. Sin quererlo comenzó con una batalla que acabó con la intervención de la policía y que hoy en día se haya convertido en una fiesta universal, declarada en 2002 Fiesta de Interés Turístico Internacional.
Durante las dos horas que dura la Tomatina, la euforia, el éxtasis y el desenfreno provocan una auténtica batalla campal que lo tiñe todo de rojo. La batalla cuenta con un programa de actividades gastronómicas en la que se pueden degustar tapas y cócteles con el tomate como protagonista. Además, se lleva a cabo el Tomatina Sound Festival, con conciertos de grupos nacionales y música electrónica.