El próximo 11 de junio arranca la competición europea tras un año de retraso por la pandemia, en la que 24 equipos buscan alcanzar la gloria de un torneo que solo conoce a diez países vencedores.
TEXTO: IBAN GARBAYO
La historia está llena de grandes hazañas futbolísticas. Toda selección sueña con alzar una Copa del Mundo, algo que solo unos pocos privilegiados han logrado hasta la fecha -ocho en concreto-. Sin embargo, en la Eurocopa la historia es diferente. A lo largo de las quince ediciones que se han disputado hasta la fecha, varios equipos han protagonizado mágicas historias donde selecciones de menor nivel se convirtieron en ‘mata gigantes’. Ahí radica la belleza del fútbol. El sueño europeo de Henri Delaunay, la victoria de Italia como anfitriona, la Alemania de Gerd Müller, la cima del fútbol holandés, las sorpresas de Dinamarca y Grecia o la doble corona de España hablarían por sí mismas.
Por fin, el próximo 11 de junio arranca una de las Eurocopas más extrañas de la historia. Será un torneo especial, no sólo por todos los condicionantes que han hecho que se retrase o las circunstancias que lo rodean, sino porque por primera vez se disputará en varios países. Serán once sedes (Ámsterdam, Bakú, Bucarest, Budapest, Copenhague, Glasgow, Londres, Roma, San Petersburgo, Múnich y Sevilla -que con cierta polémica sustituyó a Bilbao por sus restricciones debido a la covid-19-), y donde el mítico estadio londinense de Wembley albergará tanto las semifinales como la final del torneo (el próximo 11 de julio).
Podrán convocar 26 jugadores por selección
La UEFA autorizó este martes a los equipos que disputen la próxima Eurocopa (11 de junio-11 de julio) a que convoquen a 26 jugadores en lugar de los 23 habituales, para hacer frente a los riesgos de contagio por covid-19 y a eventuales cuarentenas. En cambio, solo 23 jugadores podrán figurar en la hoja de cada encuentro, precisa la instancia europea en un comunicado, por lo que los seleccionadores deberán ajustar esta lista a medida que vayan discurriendo los duelos, gracias a los tres jugadores suplementarios.
1960, la primera Eurocopa
Haciendo un poco de memoria, la primera edición de la Eurocopa, antes llamada Copa de las Naciones de Europa, fue en el año 1960 y el vencedor fue la antigua URSS, que ganó a Yugoslavia por 2-1 en la final celebrada en París. Como curiosidad, la selección española no pasó de cuartos de final ya que, al no permitir Franco la entrada de la URSS en nuestro país para disputar el partido, el equipo de la antigua Unión Soviética pasó automáticamente a semifinales. Nunca sabremos qué hubiera pasado de disputarse el encuentro, pero es importante recordar que la España de aquella época presentaba una de las delanteras más potentes de su historia con Luis Suárez, Gento, Kubala y Di Stefano. De esta forma arrancó el sueño del francés Henri Delaunay de crear un gran torneo de selecciones europeas.
Desde entonces se han disputado un total de quince Eurocopas. Con tres títulos cada uno, Alemania y España son los dominadores de la competición. Con dos títulos le sigue Francia en el tercer puesto de la clasificación. El francés Michel Platini ostenta el récord de la competición con nueve goles marcados en la Eurocopa de Francia 1984. Un año que precisamente quedó marcado a fuego en la memoria de toda la afición española que vio como España cayó en la competición frente a la anfitriona. Que se lo digan al bueno de Arconada. Platini lanzó un libre directo tras una falta inexistente de Ricardo Gallego y el balón se le coló por debajo del cuerpo a la leyenda de la Real Sociedad, que precisamente venía de salvar a España ante la RFA y Dinamarca con dos actuaciones memorables. Lamentablemente, en su excelso currículum siempre quedará marcado aquel encuentro que se saldó con derrota por 2-0.
2008-2012, la España que enamoró
Más alegres fueron los años de la generación del ‘tiki-taka’. La España que enamoró a todos con su fútbol bajo la batuta del tristemente ya fallecido Luis Aragonés. Durante 6 años (2008-2012) la selección española se convirtió en el máximo referente del fútbol mundial, en los que sumó dos Eurocopas y el Mundial de Sudáfrica. Podría decirse que el gol de Fernando Torres en la primera final de la Eurocopa de Austria y Suiza 2008 ante Alemania cambiaría la historia de la selección para siempre.
Por otro lado, la increíble historia de la Dinamarca que venció el torneo sin su gran estrella, un tal Michael Laudrup. Los jugadores daneses estaban planeando sus vacaciones de verano cuando les llamaron para disputar la Eurocopa de Suecia 1992. Ocuparon la plaza de Yugoslavia, excluída a última hora por culpa de la Guerra de los Balcanes. Casi sin tiempo de preparar el torneo, se calzaron las botas y se pusieron a jugar. Lo hicieron tan bien que fueron campeones para sorpresa de todos, incluidos ellos mismos. Y sin su gran estrella, Michael Laudrup, enfrentado con el seleccionador.
Sin estrellas tampoco, pero con un ‘catenaccio’ que ni la mejor Italia de su historia, la Grecia de Otto Rehhagel no es que ganase la Eurocopa de Portugal 2004 dando la gran sorpresa, que lo hizo, es que pareció hacerlo hasta sobrada. Con una defensa férrea -digna de los más aguerridos espartanos- desesperó a todos los finos estilistas que se le cruzaron a su paso, entre ellos España. Fue una Eurocopa de sorpresas, pero también de decepciones porque varias selecciones que estaban llamadas a estar en las últimas rondas se cayeron antes de tiempo. España, Italia o Alemania no pasaron de la fase de grupos y Francia e Inglaterra se despidieron en cuartos de final.
No puede faltar una breve mención y no menos importante a la Alemania de Gerd Müller y al genio holandés Van Basten. Bélgica fue el escenario elegido para celebrar la Eurocopa de 1972. Italia se presentaba como una de las favoritas para revalidar el título que conquistó en 1968, pero lo cierto fue que el combinado ‘azurro’ se tuvo que despedir en los cuartos de final de este torneo. Brilló sobre el resto de los equipos una Alemania Federal que contaba con uno de los mejores futbolistas del momento: Gerd Müller -más conocido como ‘Torpedo Müller’. Mención especial para Franz Beckenbauer, el incansable Uli Hoeness y la clase de Jupp Heynckes. El rodillo alemán se puso en marcha.
Por su parte, y precisamente en Alemania, se celebró la Eurocopa de 1988. Países Bajos puso fin a su mala suerte en las finales y levantó su primer título internacional con una generación inolvidable. El equipo ‘tulipán’ no estaba entre las favoritas y sufrió para clasificarse a las semifinales. Pese a todo, el combinado de Rinus Michels tenía un equipo plagado de estrellas. Koeman, Rijkaard, Gullit o Van Basten formaban parte de un once temible que acabaría haciendo historia. Precisamente fue éste último quien tuvo un papel más que protagonista con su espectacular gol de volea en la final que vencieron por 2-0 ante la URSS. Países Bajos conseguía de esta forma su primera y única Eurocopa en su palmarés.