El jugador de la selección española confiesa que para el Mundial de China «la baja de Pau Gasol es muy importante a nivel deportivo y extradeportivo»
TEXTO: JAVIER VARELA
FOTOS: VIRGINIA CARRASCO Y AGENCIAS
Sergio Rodríguez nació predestinado para ser un jugador de baloncesto. El ‘Chacho’ por aquello de haber nacido en Tenerife, tuvo «un balón y una canasta» desde bien pequeño. Los culpables, sus padres, que se conocieron jugando en la universidad y son grandes seguidores del baloncesto. Su pasión por la canasta era tal, que con sólo cinco años ahorró su paga durante semanas para poder conseguir una canasta que destrozar a base a mates. Ahora, en plena madurez deportiva, sigue «botando el balón y tirando a canasta». «Siempre he intentado disfrutar y divertirme», confiesa sin perder la sonrisa. Porque Sergio Rodríguez no para de sonreír mientras atiende a Autoclub RACE
No la pierde ni cuando recuerda aquellos tiros libres que dieron a España la medalla de bronce en los Jugos de Río de Janeiro. «Ha sido uno de los momentos que más he disfrutado… a posteriori», dice entre risas recordando la responsabilidad que había en aquellos dos lanzamientos. No estará en el Mundial de China: «Ha sido una de las decisiones más difíciles de mi vida deportiva«. Será la primera vez que falte desde su primera presencia en el Mundial de Japón 2006, logrando medallas en cada uno de los torneos disputados: dos oros (Mundial 206 y Eurobasket 2015), dos platas (Eurobasket 2007 y JJOO de Londres 2012) y tres bronces (Eurobasket 2013, JJOO de Río 2016 y Eurobasket 2017).
Sergio Rodríguez, Tras ganar la Euroliga con el CSKA de Moscú.
Ahora, tras conseguir la Euroliga con el CSKA de Moscú, ha decidido fichar por el Armani Milan. No le asusta. Con 14 años cambió La Laguna por el País Vasco y tres años más tarde emigró a Madrid. Luego llegaron Portland, Nueva York, Sacramento, de nuevo Madrid, Philadelphia y Moscú y siempre con la pasión por el baloncesto «intacta». «Lo más importante es ser positivo, al igual que la experiencia, porque según van pasando las temporadas vas conociendo lo que tienes que hacer en cada momento y eso es básico».
La pasión por el baloncesto le viene desde muy pequeño. Empezó como un juego y acabó siendo su profesión.
Mis padres jugaban al baloncesto y desde pequeño siempre tuvimos una pelota y una canasta en casa y fue algo natural. Me encantaban también otros deportes porque de pequeño he sido muy movido, pero el baloncesto siempre fue especial y tuve un ‘feeling’ con él y hasta ahora.
¿Qué sigue habiendo de aquel niño en el jugador que vemos ahora?
Queda mucho. Con diferentes experiencias, pero siempre intentado disfrutar y divertirse con lo que se hace cada día que es el mejor motor para hacerlo al mejor nivel.
¿Qué consejo le dieron de pequeño que siempre recuerda?
Que disfrutase con lo que hacía. Sea lo que sea lo que hagas, lo más importante es hacerlo con gusto y tengo la suerte de dedicarme a algo que me gusta mucho y me apasiona. Es algo que tengo que valorar.
En el baloncesto se juegan muchos partidos durante el año ¿Cómo se gestiona esa sensación de vértigo?
Estamos acostumbrados. La dinámica que tienes que tener cada día es la de hacerlo lo mejor posible. Tenemos que entrenar al máximo y saber que en nuestro caso, en un deporte de equipo, puede que no estés tan bien algún día pero tus compañeros podrán ayudarte para ganar, que es el objetivo primordial.
«La baja de Pau Gasol en el Mundial de China es muy importante a nivel deportivo y extradeportivo»
NBA, España, Rusia… es muy diferente el baloncesto dependiendo de dónde se juegue.
Sobre todo se nota la diferencia entre el de Estados Unidos, la NBA, y el de Europa. Son competiciones distintas, con formatos diferentes. Los dos estilos son bonitos y a los dos me he adaptado bien.
Sergio Rodríguez muerde el bonce de los Juegos Olímpicos de Río 2016
¿Se siente un privilegiado por haber pertenecido a la generación de otro del baloncesto español?
Sí, siempre tienes que trabajar mucho para llegar a sitios importantes. Pero también hay que ser consciente de que tienes mucha suerte de haber coincidido en momentos muy importantes en todos los equipos en los que he estado.
Ahora llega el Mundial y no estará.
Por primera vez he sentido la necesidad de parar.
Tampoco estará Pau Gasol.
La baja de Pau es muy importante a nivel deportivo y extradeportivo. Está claro que va a afectar al funcionamiento de la selección, pero también creo que hay jugadores que pueden hacerlo muy bien y se ha demostrado en las ventanas.
¿Qué papel tendrá esta selección en el Mundial?
Un papel muy bueno. Se ha demostrado durante muchos años que es un equipo ganador, con unas dinámicas muy buenas, de pasárselo bien, de divertirse y de competir al máximo nivel, así que estoy seguro que irá muy bien.
El primer objetivo será clasificarse para los Juegos Olímpicos…
Jugar con la selección española es algo muy importante y estar con la selección en unos Juegos Olímpicos es algo muy especial. Tengo confianza en que quien vaya a la selección lo va a hacer bien y se va a poder conseguir esa clasificación de forma directa. Se ha conseguido en los últimos cinco Juegos Olímpicos y parece que estar en los Juegos se dan por supuesto y es muy complicado y hay que darle mucho valor.
Y en 2020 los Juegos Olímpicos en Tokio.
Mi única experiencia en Japón fue en el campeonato del mundo y nos llevamos el oro (risas). Todo lo relacionado con Japón y la selección durante estos trece últimos años todo han sido recuerdos muy buenos.
En los últimos Juegos, en Río 2016, dos tiros libres suyos dieron a España la medalla de bronce.
Ha sido uno de los momentos que más he disfrutado… a posteriori (risas). En el momento había que meterlo, pero me siento muy orgulloso de aquellos tiros.
En sus vitrinas tiene títulos de todo tipo. ¿Alguno que le gustaría tener?
Me faltan dos importantes, pero que serán muy complicados. Me refiero al oro en una Olimpiada y el anillo en la NBA. No me puedo creer lo que he conseguido. He tenido la suerte de estar en equipo muy buenos que me han colocado en posición de poder jugar partidos muy importantes y ganar títulos muy difíciles. Por eso valoro todo lo que tengo.
Los dos que faltan son complicados, pero no hay nada imposible.
Son muy difíciles de conseguir, pero hay que ir poco a poco y disfrutar del camino.
Sergio Rodríguez posa para Autoclub RACE. Foto: Virginia Carrasco.
Este año ha completado una temporada redonda, culminada con la Euroliga.
Ha sido un año muy bueno con unos resultados muy buenos. Las valoraciones hay que hacerlas al final y hemos trabajo muy duro y de forma intensa para conseguir los objetivos, pero ganando la Euroliga todo es muy positivo. Ha sido un objetivo importante y haberla ganado me hace sentirme muy orgulloso. Es mi decimoquinto año como profesional, he ganado dos Euroligas, sé lo difícil que es y cuando la ganas, que es lo máximo a nivel europeo, tienes que disfrutarlo y con paciencia asimilarlo y saborearlo.
Los que le conocen dicen que no es muy supersticioso, pero no salta a una cancha de baloncesto sin…
No salto a la cancha sin vendarme. No soy yo de muchas supersticiones, soy más de rutinas y eso me ayuda a concentrarme.
Entre competiciones, concentraciones y eventos, ¿le quedan muchos días libres?
No muchos, la verdad. Cuando tienes posibilidad intentas pasar el máximo tiempo posible con la familia, porque al final son los que necesitan más de tu tiempo, pero me gustaría tener más.
«No salto a la cancha sin venderame, pero no soy de muchas supersticiones, soy más de rutinas porque ayudan a concentrarme»
Y cómo es eso de que se sacó el carnet de conducir en Estados Unidos.
No tenía carnet de conducir cuando me marché a los Estados Unidos con 20 años para jugar en Portland Trail Blazers. Cuando aterricé allí me lo saqué.
Supongo que a la primera, ¿no?
En Estados Unidos sí, a la primera. Luego cuando llegué a España me lo saqué también
Y su primer coche, ¿lo recuerda?
Tuve un Chevrolet Trailblazer, como el nombre del equipo.
Portland Sacramento Philadelphia Madrid, Moscú… con tantos viajes por el mundo seguro que sabe en qué país se conduce peor.
En Rusia no he conducido. Vivimos cerca y tenemos conductor porque el club nos lo recomienda. Debo reconocer que echo de menos conducir durante el año.