Sin importar si te gusta jugar solo o con amigos, una habitación ‘gamer’ puede transformar tu juego en una auténtica experiencia inmersiva. Los ‘playseats’ dan buena fe de ello.
TEXTO: IBAN GARBAYO
Con las navidades a la vuelta de la esquina, muchos comienzan a preguntarse qué regalar a sus seres queridos. Un clásico -siempre socorrido- son los videojuegos. Grandes y pequeños pueden disfrutar de un ‘hobby’ que gracias a las nuevas tecnologías y herramientas disponibles hacen que diferenciar entre lo real y lo imaginario sea cada vez más complicado. ¿Quién no ha soñado con convertirse por unas horas en piloto de Fórmula 1? Ahora es más posible que nunca.
A principios de los años 70, nadie se podía imaginar que unos cuantos puntos y barras blancas sobre una pantalla de color negro cambiarían la historia del ocio doméstico para siempre. El 29 de noviembre de 1972, Nolan Bushnell y Atari lanzaron el famoso videojuego ‘Pong’. Considerado el primer videojuego comercial de la historia, vendió nada menos que 150.000 unidades en 1975, dando origen a la actual industria ‘gamer’.
Como ya sucedería tiempo atrás con el cine, la música o el arte, los videojuegos, sus coloridos mundos y sus simpáticos personajes se han convertido en un elemento decorativo más dentro de nuestras viviendas. Hasta el punto que hoy en día es posible convertir tu habitación en un ‘paddock’ de Fórmula 1, que poco o nada tendrá que envidiar al de Red Bull, Mercedes o Ferrari. Además, cada año salen al mercado juegos cada vez más y más realistas a nivel de imagen o de experiencia y, con la evolución del mercado, se están creando cada vez más accesorios para hacer la experiencia mucho más inmersiva.
Dejando de lado el volante y los pedales, si hay un accesorio básico que debemos tener en cuenta a la hora de convertir tu casa en el perfecto ‘box racing’ son los asientos -o más conocidos como ‘playseats’. Aunque un sistema con gafas VR (realidad virtual) es un elemento bastante exclusivo ya que requiere de un equipo potente y no está disponible en todas las plataformas, los asientos sin duda mejorarán nuestra experiencia a nivel usuario. ¿El motivo? Primero, la postura de conducción es prácticamente idéntica a la de un coche de carreras. A su vez, está acreditado que adoptar una posición ergonómica y fija permiten al cerebro memorizar mejor sus movimientos, por lo que si queremos disfrutar de una experiencia ‘sim racing’ -carreras simuladas- nuestro rendimiento será mucho mejor.
Por otro lado, sea nuestro espacio más o menos pequeño, la gran mayoría de asientos permiten desmontarse en al menos dos partes, y además permiten plegar el respaldo, por lo que podemos almacenarlo ocupando mucho menos espacio. En función de su precio o complejidad, los hay incluso que permiten adaptarse a nuestra estatura, e incluso regular la inclinación del respaldo, la distancia con los pedales o el de las manos con el volante. Eso sí, hay que tener en cuenta que no son elementos baratos y su precio puede oscilar entre los 150 euros hasta más de 1.000.
Pilotos reales
El ‘simracing’ cuenta con cada vez más adeptos en nuestro país. Cada vez son más los pilotos virtuales que lo practican ya sea por ocio, o a nivel competitivo. Incluso famosos deportistas del mundo del fútbol como el portero del Real Madrid, Thibaut Courtois, o el exguardameta colchonero Miguel Ángel Moyá, disponen de uno de estos sistemas. En los últimos años, se han creado en España numerosos clubes o comunidades que han permitido crear un circuito de competiciones cada vez más completo.
Como todo en esta vida, los software de simulación son cada vez más avanzados, lo que sumado al avance en los dispositivos de conducción mencionados anteriormente, permiten recrear un entorno y condiciones idóneas para vivir una experiencia muy similar a la que tienen los pilotos profesionales de carreteras. Es más, muchos de los pilotos virtuales de ‘simracing’ que practican habitualmente esta modalidad son pilotos y probadores de coches reales. ¿Nochevieja familiar o plan con Fernando Alonso?
Un simulador para personas con movilidad reducida
La industria ‘gamer’ lleva muchos años preguntándose lo siguiente: ¿Son los videojuegos accesibles para todos los públicos? Ahora parece que sí. Con esta intención, Ford y la Fundación ONCE han lanzado este año el primer simulador de conducción para personas con movilidad reducida. Desarrollado por la empresa especializada Hi-Speed Simulators, el resultado ha sido de un hardware que permite disfrutar a las personas algún tipo de discapacidad de una experiencia ‘simracing’ exactamente igual que la de una cabina con pedales, lo que permite a sus usuarios jugar y competir. Cuenta con un volante especial con levas de aro adaptables para controlar acelerador y freno o sistemas de vibración háptica para el torso corporal, entre otros muchos detalles. Los creadores de este simulador recalcan que es compatible con todas las consolas y ordenadores, así como con todos los videojuegos. Además, se encuentra disponible con sistema de Realidad Virtual con hasta 3 monitores gaming 4k.