Los fabricantes están incorporando en sus modelos tecnologías que avisan al conductor cuando detectan que se está durmiendo, se distrae o pierde la concentración.
Texto: JAVIER VARELA
El cansancio y la somnolencia son dos de las más graves interferencias que podemos encontrarnos cualquier conductor cuando estamos en la carretera. La falta de reacción o la incapacidad para ser conscientes de que estamos sufriendo dicha anomalía puede provocar un accidente o una situación comprometida. La situación se agrava todavía más cuando hablamos de los sectores profesionales como el transporte de mercancías o viajeros. De hecho, según el Observatorio Español de Conductores – DUCIT, seis de cada 10 conductores realizan un viaje de largo recorrido sin turnarse con otro acompañante que les releve.
Pero esta situación no es aislada ni la más grave, ya que el 72% de los conductores declaran haber tenido somnolencia al volante, y casi la mitad no realiza las paradas aconsejadas, cada 2 horas o 200 km. La situación es preocupante y por ello el RACE y la Asociación de Bebidas Refrescantes (ANFABRA), en colaboración con la Dirección General de Tráfico (DGT), se ha implicado desde hace más de una década con la campaña ‘Un refresco, tu mejor combustible’, con la que pretenden alertar sobre las consecuencias de la fatiga en la conducción en especial en los desplazamientos largos, donde sus efectos pueden hacer mella en la seguridad al volante.
¿Cómo notamos la fatiga?
La fatiga se manifiesta con síntomas como la perdida de concentración, picor de ojos, visión borrosa, parpadeo constante, necesidad de moverse en el asiento, deshidratación y somnolencia. Sus consecuencias son una pérdida de atención y un aumento del tiempo de reacción ante un obstáculo de un 86%. Por tanto, es importante detectar los síntomas a tiempo y tomar las medidas necesarias para evitar una situación que puede desencadenar un accidente. Parar a descansar, pasear, hacer estiramientos y beber un refresco, mejora la atención del conductor y reduce los síntomas de la fatiga en un viaje.
TECNOLOGÍAS A PRUEBA DE SUEÑO Y FATIGA
Tal es el peligro que supone conducir con sueño o fatiga que los fabricantes están incorporando en sus modelos tecnologías que avisan al conductor cuando detectan que se está durmiendo, se distrae o pierde la concentración además de otra serie de dispositivos que velan por nuestra seguridad como el ABS, el Airbag, el ESP… Bosch, Volvo, PSA Peugeot Citroën, Continental, Toyota, Lexus o BMW son algunas de las empresas que trabajan en estas nuevas tecnologías.
Asistente de mantenimiento de carril
El asistente de mantenimiento de carril utiliza una cámara para detectar las marcas de la calzada por delante del vehículo. Si la función detecta que no existe la distancia mínima definida con respecto a la limitación de la calzada, el asistente podrá girar el volante en sentido contrario de modo suave pero perceptible, para mantener el vehículo en el carril. El conductor puede controlar la función en cualquier momento, por lo que sigue siendo responsable del vehículo.
Asistente cambio de carril
El asistente de cambio de carril puede prevenir situaciones de peligro, reduciendo así el riesgo de accidente. El sistema se basa en dos sensores de radar de medio alcance situados en la parte trasera del vehículo que controlan las zonas laterales y diagonalmente traseras del vehículo. Si el sistema detecta vehículos en el ángulo muerto o vehículos que se aproximan rápidamente por detrás, advertirá al conductor, por ejemplo, de manera óptica mediante un símbolo iluminado en la zona del retrovisor lateral. Si el conductor pone el intermitente porque desea cambiar de carril, el sistema podrá realizar la advertencia también acústicamente o táctilmente para alertar también al conductor del peligro potencial.
Sistema de frenado de emergencia
El sistema avisa al conductor de una posible colisión por alcance y, si el conductor no reacciona, realiza una frenada automática de emergencia para evitar o reducir las consecuencias del accidente. Este sistema se basa en la conexión en red del sistema de sensores de radar con el Programa Electrónico de Estabilidad ESP y analiza de forma continua la circulación delante del vehículo. El Sistema Predictivo de Frenada de Emergencia se activa nada más arrancar el vehículo y ayuda al conductor en todos los rangos de velocidad, tanto de día como de noche. No obstante, no exime al conductor de la responsabilidad de conducir siempre atento, con cuidado y precaución.
Sensores en el volante
Este tipo de sistemas utilizan sensores instalados en el volante del coche que analizan nuestro comportamiento en el manejo del volante en condiciones normales. De esta forma, en el momento que variamos ese comportamiento entenderán que el conductor está distraído, fatigado o somnoliento. En estas situaciones, en lugar de hacer pequeñas y suaves correcciones, solemos hacer correcciones bruscas. Es en ese momento cuando el sistema alerta al conductor haciendo saltar una alarma sonora y mostrando un mensaje en la pantalla del cuadro de instrumentos indicando que, por seguridad, es necesario parar a descansar.
Cámaras reconocimiento facial
Se fundamenta en el uso de una cámara, que se coloca sobre el volante y enfoca al conductor de forma que le permite supervisar los ojos de éste para comprobar si el parpadeo es normal o si indica sueño. Además permite comprobar si se despista de la conducción y es capaz de reconocer expresiones faciales que desvelan cansancio y fatiga. En caso de detectar cualquiera de estas situaciones, se pone en marcha una alerta para avisar al conductor –de forma sonora y con un mensaje en el cuadro de instrumentos- de que debe parar a descansar.
Sistema de detección de fatiga
El sistema detecta la somnolencia del conductor analizando su comportamiento al volante para identificar lo que se llama ‘punto muerto’, que son fases en las que no conduce (no hay movimiento del volante) durante un breve periodo de tiempo y que finalizan con una corrección brusca con el volante. Esto suele ser una señal de que la concentración del conductor está fallando. El sistema combina la frecuencia y la fuerza de estas reacciones con otros datos como el de la velocidad del vehículo, la hora del día y el uso de otros indicadores para calcular un índice de cansancio. Si ese índice supera un valor específico, suena una señal acústica de advertencia y se enciende un testigo luminoso con una taza de café para avisar al conductor de que está cansado y le recuerda del peligro que corre si continúa conduciendo.
TECNOLOGÍA PARA EL TRANSPORTE DE PASAJEROS
Uno de los sistemas es el Seeing Machines’ Fatigue Monitoring System y utiliza cámaras especiales instaladas en el interior del autobús para controlar la mirada del conductor. Si detecta que este se distrae o sufre microsiestas que duran menos de un segundo y de las que el conductor no es consciente, el sistema activa un motor de vibración integrado en su asiento. Además se dispara una alarma en el asiento destinado al copiloto para alertarlo sobre el hecho de que debería hacerse con el control del vehículo.
Otro de los sistemas es el MagicEye, que gracias a una cámara, un dispositivo de procesado y un avisador -que puede ser sonoro o visual- supervisa los parpadeos y movimientos de los ojos y la cabeza con el objetivo de detectar acciones anómalas que conducen a reacciones de riesgo por parte del conductor. En ese caso se activan las alarmas de aviso al conductor. Incluye servicios de grabación de imágenes y registro de alertas o eventos. También información que se transmite a una unidad central a través de una plataforma web, lo que permite extraer conclusiones y gestionar toda la información recogida para la detección de infracciones cometidas y la planificación de rutas más seguras o la optimización hábitos en la conducción.
CONSEJOS PARA EVITAR DE FATIGA AL VOLANTE
Para evitar la aparición de la fatiga, hay que tener en cuenta que conocer los síntomas es la mejor forma de prevenirla. En largos desplazamientos hay que recordar tres reglas básicas: parar al menos cada 2 horas, realizar estiramientos e ingerir un refresco, que hidrata, no contiene alcohol y su contenido en azúcares aportará los niveles necesarios de glucosa al cerebro para mantener su adecuada actividad.
- Ponte en carretera descansado: duerme un mínimo de 7 horas y evita viajes después de la jornada laboral. Si, en cualquier caso, tuvieras que viajar tras el trabajo procura descansar un rato antes del viaje y reponer energías.
- Ajusta bien el asiento (banqueta y respaldo), el reposacabezas y haz un reglaje en profundidad y altura del volante. Viajar de forma cómoda reduce los calambres y los dolores musculares.
- Tómate la conducción de forma relajada y no intentes recuperar el tiempo perdido tras un atasco. El objetivo es llegar, y llegar bien.
- Adopta las mismas precauciones al realizar desplazamientos cortos que en los de largo recorrido. Tampoco bajes la vigilancia en los kilómetros finales. Muchos accidentes se producen en estos momentos.
- Durante el viaje, descansa cada dos horas o 200 kilómetros y aprovecha para hacer unos estiramientos para recuperar el tono físico. Reduce este plazo si viajas de noche.
- Mantente hidratado, ya que la falta de líquidos provoca, entre otras cosas, una reducción de la atención, dolor de cabeza y cansancio muscular.
- Un nivel bajo de azúcar genera fatiga y falta de atención. Evita que ocurra durante el viaje.
- Nunca bebas alcohol si vas a conducir, y consulta a tu médico si tomas medicamentos.
Cuando pares, toma una bebida refrescante ya que, además de hidratarte, ayudará a despejarte y mejora los niveles de atención. Un refresco es tu mejor combustible… Quita la sed, no los puntos.