El presidente del RACE es, desde el pasado mes de diciembre, el máximo responsable del gobierno y la gestión corporativa de la Federación Internacional de Automovilismo para los próximos cuatro años. Además, el director general del RACE, Jorge F. Delgado, fue reelegido como miembro del Consejo Mundial de la FIA.
TEXTO: JAVIER VAGON
El presidente del Real Automóvil Club de España (RACE), Carmelo Sanz de Barros, es desde el pasado mes de diciembre el máximo responsable del Senado de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) para los próximos cuatro años.
Carmelo Sanz de Barros y Mohammed ben Sulayem.
La elección de Sanz de Barros tuvo lugar durante los comicios celebrados en París, en el marco de la Asamblea General de la FIA, en los que la candidatura encabezada por el ex piloto de rallyes, Mohammed ben Sulayem, fue proclamada ganadora.
Carmelo Sanz de Barros explicó, tras ser designado para el cargo, que «mi principal prioridad como presidente del Senado de la FIA será garantizar un gobierno claro y transparente de la institución, poniendo a disposición de la FIA la experiencia adquirida durante más de 30 años en grandes corporaciones internacionales y organizaciones empresariales, además de los más de 10 años al frente del RACE, el mayor automóvil club de España que presta servicios a más de 10 millones de clientes. Todo ello desde la convicción de que sólo un adecuado gobierno corporativo permite alcanzar el éxito en las organizaciones globales».
El Senado es el principal órgano de gobierno de la FIA. Con competencias tanto en el ámbito deportivo como en el de movilidad, este organismo es responsable de la definición de las políticas generales de la FIA, su buen gobierno, el desarrollo comercial y la gestión financiera de la organización que garanticen su estabilidad presupuestaria.
La elección de Sanz de Barros a la Presidencia del Senado de la FIA acrecienta el peso y la representatividad de España en el panorama del automovilismo internacional. Una presencia que, además, se ve reforzada con la reelección de Jorge F. Delgado, CEO del RACE, como miembro del Consejo Mundial de la FIA, y la designación de Manuel Aviñó, presidente de la Real Federación Española de Automovilismo como vicepresidente del Área Deportiva para Europa, quien también formaba parte de la candidatura liderada por Ben Sulayem.
La FIA, fundada en 1904 por seis clubes, entre ellos el RACE, es hoy una organización global que agrupa a 245 automóviles club y federaciones deportivas nacionales que representan a más de 80 millones de automovilistas de 143 países. La FIA, que organiza y promueve la Fórmula 1 -así como la totalidad de los campeonatos del mundo de automovilismo- es, junto con el Comité Olímpico Internacional y la FIFA, uno de los tres principales organismos deportivos internacionales. Así mismo, la FIA representa y defiende a los automovilistas a nivel mundial, desarrollando programas e iniciativas en materia de seguridad vial y actuando como institución referente en la definición de políticas públicas sobre el futuro de la movilidad.
Qué es el Senado de la FIA
El Senado de la FIA es uno de los órganos más importantes de la FIA. Reúne sus dos principales áreas de competencia y supervisa la gestión y las finanzas de la federación.
La labor del Senado de la FIA es manejar asuntos relacionados con la gestión y la política general de la Federación Internacional de Automovilismo que no pueden ser tratados por ninguno de los consejos mundiales. Por ello, sus principales responsabilidades son financieras. Bajo la asesoría del Comité de Auditoría, cierra las cuentas, prepara los presupuestos del Consejo Mundial y gestiona el presupuesto consolidado. Bajo este mandato, el Senado también es responsable de las cuestiones comerciales que puedan llamar la atención de la FIA, lo que significa que realiza una labor fundamental para el perfecto funcionamiento de la FIA.
Puesto que desempeña un papel central e importante, si la FIA se encontrara sin presidente, el presidente del Senado estaría a cargo, con el apoyo de los presidentes delegados, y el Senado organizaría una asamblea general extraordinaria para elegir un nuevo presidente. De ahí la importancia del cargo que ostenta durante los próximos cuatro años el Presidente del Real Automóvil Club de España (RACE), Carmelo Sanz de Barros.