Esta red social orientada al uso empresarial, a los negocios y al empleo es la única plataforma de conexión social laboral que no solo permanece, sino que incluso afianza su posición.
TEXTO: ARANTXA HERRANZ
Redes sociales hay muchas y cada una de ellas cumple un propósito o es más utilizada por una generación en concreto. Facebook, Twitter (ahora X), Instagram, TikTok… La tónica general es que todas (o casi todas) son más lúdicas y para el entretenimiento con familiares y amigos. Salvo una: LinkedIn, la única plataforma de conexión social laboral que no solo permanece, sino que incluso afianza su posición. ¿Por qué? ¿Qué tiene LinkedIn para seguir resistiendo en un mundo, el de Internet, tan efímero y tan dado a la volatilidad?
Historia de LinkedIn
LinkedIn fue fundada el 28 de diciembre de 2002, aunque no fue lanzada oficialmente hasta mayo de 2003. Desde sus inicios, LinkedIn se ha centrado en conectar a profesionales y empresas, permitiendo a los usuarios compartir su experiencia laboral y habilidades.
Apenas cuatro años y medio después de ver la luz, LinkedIn ya contaba con más de 25 millones de usuarios registrados, extendiéndose a empresas de 150 sectores industriales diferentes. El 19 de mayo de 2011, LinkedIn se convirtió en la primera red social estadounidense en cotizar en bolsa, con un precio inicial de 45 dólares por acción.
El impacto de esta red social es tal que en junio de 2016 Microsoft anunció la compra de LinkedIn por 26.200 millones de dólares, lo que hizo que esta operación se convirtiera en una de las compras más costosas de Microsoft (después de Skype Technologies en 2011).
Aunque opera como compañía completamente independiente, la red social no ha dejado de crecer en todo el mundo y en estos momentos supera los 100 millones de usuarios registrados.
Funcionamiento de LinkedIn
Como decíamos antes, lo que diferencia a LinkedIn de otras propuestas es que es una red social orientada al uso empresarial, a los negocios y al empleo. Aunque tuvo competidores como Xing, poco a poco el resto de plataformas han ido quedando en el olvido, mientras que LinkedIn sigue ampliando su propuesta (la última es con una serie de juegos).
Los usuarios pueden crear un perfil profesional, establecer relaciones con clientes y potenciales clientes, buscar empleo, unirse a comunidades de interés, seguir a las empresas o personas que les interesen para estar al día de las novedades y conectar con otros profesionales. Actualmente, LinkedIn cuenta con un modelo de negocio diversificado e ingresos provenientes de suscripciones de usuarios, publicidad y soluciones para selección de personal.
Es precisamente este enfoque en las relaciones profesionales y comerciales lo que le ha garantizado el éxito, pese a que cuando vio la luz era una propuesta contra corriente, pues la parte más lúdica y personal era lo que primaba en las redes sociales iniciales.
Si tuviéramos que enumerar las razones de su éxito podríamos señalar:
- Mayor visibilidad: LinkedIn permite a los usuarios aumentar su visibilidad y ganar reconocimiento de marca.
- Mayor alcance de contenidos: Los usuarios pueden compartir artículos, entradas de blog y otros contenidos para demostrar su experiencia y relacionarse con su red. De hecho, con la caída de X, esta opción se ha vuelto aún más popular entre los usuarios.
- Mayor credibilidad: Las recomendaciones y valoraciones de los usuarios pueden aumentar su credibilidad profesional.
- Mejor posicionamiento en las búsquedas de Google: Los perfiles de LinkedIn suelen aparecer en los resultados de búsqueda de Google, lo que puede aumentar la visibilidad de los usuarios.
- Oportunidades laborales: LinkedIn permite a los usuarios buscar empleo y a las empresas publicar ofertas de trabajo. Es además una de las principales fuentes de ingreso de la plataforma.
- Generación de leads cualificados: LinkedIn puede ser una herramienta eficaz para generar leads cualificados para las empresas.
Críticas a LinkedIn
A pesar de su éxito, LinkedIn también ha recibido algunas críticas. De hecho, algunos aseguran que puede llegar a ser la red social más tóxica, puesto que casi todos los post son de éxitos profesionales y laborales y en los que las críticas a las condiciones laborales de los empleadores no son bien recibidas.
Algunos usuarios también han mostrado su preocupación por cuestiones como la privacidad y la seguridad de los datos. Otros han criticado la cantidad de solicitudes de conexión no solicitadas y el comportamiento de spam en la plataforma. Además, ha habido críticas sobre la precisión de los perfiles de los usuarios, ya que algunos pueden exagerar sus habilidades o experiencias. También ha habido críticas sobre la eficacia de LinkedIn como herramienta de búsqueda de empleo.
Pese a todo, lo cierto es que sigue siendo una red social ampliamente utilizada y que ha visto pasar delante de sus ojos a muchas otras propuestas, algunas de las cuales han sabido gestionar peores momentos de altibajos. Por ejemplo, Friendster, lanzada en 2002, fue una de las primeras redes sociales pero, no logró mantener su popularidad y finalmente cerró en 2015. Algo similar a lo que ocurrió con Myspace, una de las redes sociales más populares en su apogeo que ha ido perdiendo gran parte de su base de usuarios con el tiempo. Aunque todavía existe, su uso es mínimo en comparación con su popularidad pasada.
Vine, por su parte, fue una de las primeras plataformas que permitía a los usuarios compartir vídeos cortos. A pesar de su popularidad inicial, Vine cerró en 2016.
Otras redes sociales
En el universo de las redes sociales existen varias opciones que, aunque siguen en funcionamiento, tienen una actividad mínima en comparación con su apogeo. Algunas de estas incluyen Ello, Vero, Mastodon, y GAS.
Más recientemente, ClubHouse (que basaba su propuesta en los canales de voz, especialmente en directo) o BeReal (que quería combatir el postureo de otras plataformas, especialmente Instagram), han sido fenómenos virales, en los que su punto álgido ha sido exponencial, ero se han desinflado como un soufflé al poco tiempo.
Así pues, en un mundo donde las redes sociales han experimentado altibajos a lo largo de su historia, las que han logrado adaptarse y sobrevivir a diversas crisis frente a las que han desaparecido o han quedado relegadas a un uso mínimo han demostrado saber dar con la verdadera tecla del éxito.