Homologado de acuerdo al Reglamento n.º 129 de la CEPE. SRI diseñado para un largo periodo de uso, con algunas debilidades por lo que respecta a la facilidad de uso. La idea de ofrecer un único SRI para varios grupos de peso tiene ciertas ventajas. En la práctica, tiene limitaciones y desventajas.
Cuando se utilice con niños de menos de 100 cm de altura, el SRI siempre se debe instalar a contramarcha. Instalado a contramarcha ofrece una protección muy buena en caso de impacto frontal. El cinturón de seguridad molesta a la hora de colocar al niño en el SRI y abrocharlo.
El SRI se puede utilizar con recién nacidos, pero no para transportarlos hasta el coche. Está homologado hasta una altura de 145 cm, lo que limita el uso recomendado hasta el 150 cm.
En algunos casos, la estabilidad puede mejorar si se retira el reposacabezas del vehículo o se vuelve a instalar mirando hacia atrás.