Al igual que los humanos tenemos una columna vertebral y un esqueleto que sirve de sujeción para nuestros músculos y de protección a los órganos, un vehículo hace lo propio, sólo que en lugar de utilizar huesos recurre a diferentes metales que forman otro tipo de esqueleto llamado chasis de un coche.
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Rafael Soriano, asesor técnico del RACE, define el chasis como la estructura principal de un coche que soporta todos los elementos; aquí se incluyen el motor (o motores si es un híbrido o un eléctrico), la amortiguación, los frenos, la transmisión, los asientos, etc.
¿Cuál es la misión del chasis de un coche?
Este esqueleto metálico, que también se lo conoce técnicamente como marco, tiene como función principal soportar las tensiones y esfuerzos tanto cuando está parado como desplazándose. Pero no son las únicas. También se encarga de:
- Soportar la carga total del vehículo: aquí se incluye el peso de los ocupantes, el equipaje, el propio peso de los elementos mecánicos que conforman el coche (paragolpes, aletas, motor, transmisión…) e incluso el de algunos elementos de arrastre como los remolques.
- Marca la superficie y el espacio en el que se van a montar todos los circuitos del coche. De él depende que el motor vaya a tener una disposición más o menos longitudinal o transversal, el tamaño de éste (que influye en su potencia y cilindrada), el tamaño de la caja de cambios que puede llevar, cómo van a estar instalados los cables eléctricos, las tuberías del circuito de refrigeración, etc.
- Recibe y soporta todas las tensiones generadas por las irregularidades de las carreteras como los baches o desniveles.
- El chasis del coche también es el encargado de soportar los esfuerzos creados tras una aceleración o una frenada. Tanto en los coches de tracción delantera como en los de tracción trasera se genera una torsión que el chasis debe absorber.
Para conseguir aguantar los esfuerzos mecánicos, el chasis está formado por materiales de diferentes durezas y elasticidades que están repartidos por distintas zonas del vehículo. Lo más común es que haya aleaciones de acero y otros metales como el aluminio. Sin embargo, en algunos coches deportivos o de alta gama también puede haber aleaciones de magnesio o incluso fibra de carbono para aligerar el peso.
El bastidor: el protagonista de las partes del chasis de un coche
Dentro del chasis de un coche, el bastidor es su pieza más importante. Es una estructura formada por travesaños y largueros que sirven de soporte para fijar todas las piezas y elementos mecánicos que pertenecen al vehículo. En definitiva, es lo que hace que un coche tenga forma de coche con su cabina para los pasajeros en la que se incluye el techo, los largueros interiores, los laterales, etc. El cometido del bastidor es preservar la seguridad de las personas que ocupan el vehículo en caso de accidente.
Más allá del bastidor, las otras piezas que forman el chasis son más travesaños repartidos por toda la base, que son los que permiten que la estructura sea segura y esté reforzada para aguantar las tensiones y esfuerzos generados con el movimiento del coche.
Tipos de chasis de coche: el más común, el autoportante
Existen diferentes tipos de chasis. Los más comunes son:
- Chasis autoportante: es un conjunto de piezas unidas por medio de soldadura que forman la estructura y el chasis del coche. El chasis autoportante se completa exteriormente con elementos desmontables como el capó, las puertas de los pasajeros o el maletero, entre otros. Además, la carrocería va soldada al bastidor lo que permite que se pueda llegar a desmontar el bastidor del chasis y así ahorrar en tiempo y costes de reparación en caso de avería. Es el chasis que suelen llevar la mayoría de los coches que ves circulando por la calle.
- Chasis monocasco: es el mismo tipo de chasis que el autoportante, aunque en este caso viene montado en una sola pieza con el bastidor, es decir, forman un único bloque.
- Chasis de escalera: también se llama chasis independiente. Está formado por dos vigas longitudinales muy gruesas y éstas a su vez están soldadas a unos travesaños más finos dispuestos transversalmente. La unión de todos estos elementos forman visualmente una especie de escalera, de ahí que se denomine chasis de escalera. A este chasis se le atornilla el bastidor y el resto de elementos del coche.
Ya que los chasis están fabricados para dar la máxima seguridad en la estructura del coche, en caso de accidente grave es clave observar si este elemento ha sufrido algún daño y analizar si se puede arreglar o no según la desviación, deformación o incluso rotura que tenga alguna de sus piezas.
También depende del tipo de acero que haya sufrido daños. El chasis está formado por distintos tipos de aceros y algunos son más resistentes y elásticos que otros, así que a la hora de arreglarlos, va a ser más o menos difícil trabajar con ellos. Si el chasis ha sufrido deformaciones importantes es mejor cambiarlo por otro nuevo o, directamente, declarar el coche como siniestrado.
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