En este artículo no vas a encontrar una comparativa de los coches que menos consumen por marcas. El enfoque de este contenido es algo más genérico, ya que lo que queremos analizar es qué tipo de motor térmico consume menos y por qué: ¿el diésel o el gasolina? Si tienes algo de conocimientos del mundo de la automoción responderás que el diésel y, en efecto, así es en comparación con un motor de parecidas características que utiliza la gasolina como carburante, ¿pero cuál es la razón?
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¿Diésel o gasolina: qué coches gastan menos carburante y por qué?
Tanto los motores diésel como los de gasolina que llevan la gran mayoría de los coches que circulan por la calle son de cuatro tiempos. A partir de este punto en común se encuentran importantes diferencias entre un motor y otro en dos de los tiempos:
- Compresión: una vez que se ha hecho la admisión del aire (primer tiempo del motor), en el caso de los diésel la compresión (segundo tiempo del motor) del mismo es de casi el doble en comparación con los motores de gasolina.
- Explosión o combustión: mientras que en un motor de gasolina al tercer tiempo se llama explosión (una chispa produce la explosión de la mezcla de aire y gasolina), en un diésel se llama combustión porque la mezcla se inflama gracias a la alta compresión, sin que haya chispa de una bujía. Aquí está la clave de un consumo de carburante más reducido en el caso de los diésel: se necesita menos combustible para que la mezcla prenda y genere una fuerza y un movimiento en los pistones que se transmiten a través del cigüeñal hasta las ruedas.
A igualdad de potencia, un motor diésel gasta menos porque el gasóleo es un combustible con una densidad energética mucho mayor que la gasolina. Si al mayor poder calorífico de este combustible se suma que el motor diésel trabaja a una mayor compresión (17:1 frente al 10:1 del gasolina), el rendimiento es mayor que en el caso de los motores de gasolina.
Además, hay que tener en cuenta que los motores diésel ofrecen un par motor mayor a bajas revoluciones, lo que significa que no necesitará consumir tanto combustible, sobre todo a una velocidad constante o cuando el vehículo va cargado. Por esa razón, si vas a hacer muchos kilómetros al año, sobre todo por carretera, es más recomendable utilizar un diésel ya que los coches que menos consumen son los que utilizan este tipo de propulsor. No obstante, aunque consuman menos es importante reseñar que cada vez son menos aceptados en las ciudades por las normativas anticontaminación y sus niveles de óxidos de nitrógeno, sobre todo aquellos motores con más años debajo del capó, ya que los de nueva matriculación resuelven ese problema con el AdBlue.
Coches con consumos bajos: los híbridos como alternativa
Más allá de los coches con motores de gasolina o diésel, existe la opción cada vez más buscada por los españoles de los coches híbridos, vehículos con motores de gasolina que también tienen un pequeño motor eléctrico. Los hay enchufables y no enchufables, y dependiendo de cada uno se pueden hacer más o menos kilómetros en modo eléctrico. Esto va a facilitar que los consumos del vehículo se reduzcan al circular sin tener que utilizar el motor de combustión.
Por tanto, si quieres bajar el consumo de combustible utilizando un coche que tenga un motor de gasolina, un híbrido puede ser una opción a considerar, aunque debes tener en cuenta otros factores a la hora de comprar uno. Si tu intención es olvidarte de los carburantes, tendrás que enfocar tu búsqueda en los coches eléctricos, planteándote antes los pros y contras derivados de este tipo de vehículos.
¿Buscas un coche que consume poco? No todo depende del motor
Desde 2017, los fabricantes de coches se tuvieron que adaptar al ciclo WLTP, un procedimiento más realista que el anterior NEDC, que permite medir con algo más de exactitud el consumo y las emisiones de los coches que salen al mercado, datos que deben publicar los fabricantes cuando ponen a la venta sus modelos. Sin embargo, estas mediciones están hechas con unas condiciones muy concretas y no contemplan todos los casos reales que se pueden dar en un uso diario de un coche. En el consumo de un coche influye:
- La carga del coche: cuantos más bultos lleve el coche, más consumirá.
- La presión de los neumáticos: si circulas con una presión más baja que la recomendada por el fabricante, el neumático tendrá una superficie de rozamiento mayor contra el suelo y, por tanto, el consumo será más alto.
- El tipo de conducción que realices: sin duda, una conducción eficiente te va a rascar menos el bolsillo que si practicas una conducción deportiva.
- La orografía del terreno: las cuestas van a hacer que consuma más tu vehículo.
- El viento: si tu coche circula con el viento en contra vas a tener que pisar algo más el acelerador si quieres mantener cierta velocidad constante.
- La aerodinámica: si, por ejemplo, conduces con las ventanillas bajadas crearás más resistencia al avance y, por tanto, el coche consumirá más combustible.
- El mantenimiento del vehículo: un coche que no tenga al día las revisiones puede derivar en un consumo de combustible mayor por las posibles fugas o el funcionamiento defectuoso de alguna de sus piezas.
Todos estos puntos son claves para conseguir que tu coche consuma menos carburante así que te damos serie de recomendaciones y trucos para ahorrar en combustible. Además, recuerda que por ser Socio del RACE tienes descuentos en gasolina.
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