De vez en cuando es posible que veas por la carretera cómo algunos tubos de escape de los coches sueltan humo de distintos colores. En los vehículos nuevos o los que están bien mantenidos lo normal es que se perciba un humo blanquecino generado por la evaporación del agua. Sin embargo, cuando los propietarios del vehículo no cumplen con las revisiones periódicas necesarias es cuando empiezan a surgir las averías.
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Son precisamente los diferentes colores de humo los que te pueden dar la pista de qué le pasa al corazón de tu vehículo. Del humo negro y del humo blanco ya hemos hablado anteriormente, así que en esta ocasión nos vamos a centrar en el humo azul que sale de tu coche.
Si hay humo azul al acelerar, la avería puede ser muy grave
Según Juan Manuel García Llorente, formador técnico del RACE para toda la red de proveedores, si sale por el tubo de escape del coche un humo azul la avería puede ser grave. En los coches más antiguos (más de 15 años) suele aparecer por el desgaste de las piezas del motor, sobre todo si se han hecho muchos kilómetros y se han llevado a un régimen alto de vueltas.
En este tipo de vehículos lo más común es que el aceite se filtre por los segmentos o los retenes de válvulas que están en la culata. Una avería muy común en la actualidad es que el aceite se filtre al motor por los cojinetes de fricción en los turbos de los motores turboalimentados al ir cogiendo holgura. El humo resultante después de que el aceite se queme en el motor sería entre azulado y blanquecino.
En el caso de que la avería fuese en un motor turboalimentado habría que sustituir el turbo, lo que implica un gasto de entre 1.000 euros y 3.000 euros, dependiendo de si vas a arreglarlo a un sitio especializado o en un taller del propio fabricante.
En los motores sin turbo el hecho de que se queme aceite indica que el motor está llegando al final de su vida útil. Habría que mirar el desgaste de los retenes o los segmentos, lo que supondría abrir el motor por la culata, lo que implicaría un gasto más que considerable.
Si sale humo azul del coche, y la filtración se está realizando por los segmentos del motor, existen aditivos que prometen corregir ese humo azul, sin embargo, el resultado va a ser más o menos efectivo dependiendo del desgaste que tengan las piezas:
- Si el desgaste es muy acusado, estos aditivos no servirán para evitar que salga el humo blanco azulado del motor diésel.
- Si el desgaste no es muy acusado, entonces sí que podría tener un resultado efectivo. Esto es porque los aditivos crean una capa de silicona que sella los segmentos para que no se filtre el aceite. El Slick 50 es uno de los aditivos que más se usa para evitar el humo azul del coche y para reducir el consumo de aceite.
Para evitar males mayores, es fundamental hacer un mantenimiento adecuado del motor (y del vehículo en general) y cambiar el aceite que le corresponda al propulsor (viscosidad, aditivos…) cuando el fabricante lo indique. Si no, con el tiempo aparecerá el humo azul y según los elementos del motor que estén dañados podría no merecer la pena arreglarlo por su alto coste, sobre todo en los coches más antiguos.
Recuerda además que si aparece el humo azul, la avería no solo puede ser grave si el aceite llega al motor. También puede afectar al catalizador, que está pensado para reducir los gases contaminantes que salen por el tubo de escape y no para recibir el aceite quemado que llega del motor. Esto puede hacer que deje de funcionar como debe y que tengas que cambiarlo antes de lo que el fabricante aconseja. Para que te hagas una idea, cambiar un catalizador puede suponer un desembolso de entre 200 euros y cerca de 1.000 euros.
Cuanto tengas algún problema con tu vehículo, si eres Socio del RACE tendrás un servicio de garantía mecánica. Si no es posible repararlo in situ, te proporcionaremos un vehículo de sustitución hasta que la avería esté solucionada.
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