Los viajes en coche no suelen ser bien recibidos por los niños. Se cansan de estar sentados en su sistema de retención infantil sin poder moverse libremente, se aburren, se marean… y esta situación tampoco ayuda a disfrutar de un viaje seguro. Un estudio del RACE sobre cómo influyen los ocupantes de un coche en el conductor confirmaba que los bebés y los niños pequeños son los acompañantes que más distracciones provocan al conductor.
Nos preocupamos por tu bienestar y el de tu familia.
Protege a los tuyos con RACE Unlimited
¡Conoce todas sus ventajas!
La famosa pregunta “¿Cuánto falta para llegar?» nada más iniciar un trayecto es un mal presagio cuando viajamos en coche con niños. Para evitar distracciones del conductor o que éste se irrite ante la insistencia del niño, es importante planificar bien el viaje. No solo hay que prever las paradas que haremos a lo largo del trayecto, recordamos que es importante que se realicen al menos cada dos horas o 200 kilómetros e incluso más frecuentemente cuando vamos con niños. También hay que llevar sus juguetes o peluches preferidos y preparar juegos para que los más pequeños viajen entretenidos. Será garantía de un viaje en coche más seguro.
Siempre se puede recurrir a las películas o series en DVD, pero el viaje por vacaciones puede ser un buen momento para jugar con nuestros hijos y hacerles partícipes del paisaje que nos acompaña durante el trayecto. Además de divertirse también podrán aprender cosas nuevas.
¿A qué podemos jugar con niños al viajar en coche?
Las matrículas de los coches dan mucho juego
Dependiendo de la edad de los niños, las matrículas de los coches son una buena excusa para practicar operaciones de matemáticas. ¿Tus hijos ya saben sumar? Les puedes pedir que sumen los números de la matrícula del coche que va delante, gana el más rápido en hacer la suma. A los más mayores se les puede complicar la competición pidiéndole que multipliquen los números.
Y si el niño todavía no sabe sumar, puedes retarle a leer simplemente los números de las matrículas, identificar el número más alto, el más bajo…
También se puede repasar lengua con las letras que acompañan a los números. Además de leerlas, se les puede pedir que formen palabras que empiecen con cada una de ellas.
¿Y si jugamos al ‘veo, veo’?
Es un juego clásico que gusta a todas las edades. Se trata de elegir un objeto visible por todos y adivinarlo en el menor tiempo posible. La pista para los más pequeños pueden ser los colores del objeto, mientras que para los más mayores se les ayuda con la letra inicial del objeto elegido. Quien primero adivina, será el encargado de iniciar de nuevo el juego del ‘veo, veo’.
Inventamos un cuento: ‘Érase una vez…’
Otra manera de tener a los niños entretenidos es creando un cuento. El adulto empieza un cuento con ‘Érase una vez una familia en coche…’, ‘Érase una vez un niño…’. Cada miembro de la familia deberá ir añadiendo el escenario, personajes, situaciones, acciones… e incluso se podrán añadir escenas de humor o de terror en función de los gustos de los niños. Además de ser divertido, les ayudará a fomentar su creatividad y la narrativa.
Cantando en el coche
¿A qué niño no le gustan la música y las canciones? Si el niño reclama atención es buen momento para aclarar tu voz y sacar al artista que llevas dentro cantándole sus canciones infantiles o aquellas que tú aprendiste de pequeño.
Aprender educación vial con las señales
Nunca es pronto para enseñar a un niño educación vial y el trayecto en coche es uno de los mejores momentos. Para jugar primero tienes que explicarles de forma breve y clara qué función tiene cada una de las señales verticales que nos solemos encontrar en carretera: velocidad limitada, prohibido adelantar, fin prohibición de adelantar, aproximación a una curva, presencia de animales en la calzada… El juego consiste en ir atento a la carretera para descubrir estas señales y adivinar para qué sirven.
Cuando planifiques todos estos juegos recuerda que el conductor debe concentrarse 100% en la conducción, por lo que posiblemente no podrá jugar a la mayoría de juegos. Respeta siempre sus necesidades para evitar distracciones al volante y explícale al niño la necesidad de estar tranquilo en su silla para que el conductor realice correctamente su tarea. Si los niños están incómodos o no dejan de quejarse y llorar, lo recomendable es hacer una parada que les permita despejarse o correr un rato en el caso de que ya sepan caminar.
Cuando viajes con niños no olvides…
– Sentarlos correctamente en un sistema de retención homologado. Comprueba que está bien anclado en el asiento y el niño bien abrochado.
– Deben viajar con ropa cómoda, que transpire.
– Lleva a mano una botella de agua o el biberón para hidratarle con frecuencia.
El RACE te ayuda a elegir la mejor silla para tu hijo.
Comparador sillas infantiles