Tu coche tiene cientos de piezas mecánicas y eléctricas que contribuyen a que el vehículo funcione con normalidad. Sin embargo, algunas pueden fallar y puede surgir una avería que provoque que tu coche no arranque.
Los Socios del RACE disfrutan de una garantía mecánica con reparaciones incluidas de multitud de piezas.
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Juan Manuel Llorente, formador técnico del RACE, explica que en el coche pueden aparecer muchos tipos de errores, algunos más comunes que otros, relacionados con el arranque del vehículo. Para clasificarlos, hay que tener en cuenta que para que un coche funcione necesita algunos elementos básicos:
- Electricidad.
- Combustible.
- Comburente (aire).
Pero estos no son los únicos: también hay otros con los que hay que contar. A continuación profundizamos en todos ellos.
No arranca el coche porque hay un problema con la electricidad
Dentro de este apartado puedes encontrar diferentes elementos que puede que no funcionen correctamente. Los más comunes son:
La batería
Si una batería no está en buen estado, tu coche difícilmente se pondrá en marcha. Es uno de los motivos más comunes de que no pueda rodar tu fiel amigo. Tu vehículo necesita electricidad para que funcionen diferentes componentes y, si la batería no almacena la energía suficiente, no arrancará.
En este artículo puedes leer los problemas que puedes tener con la batería del coche y cómo te podemos ayudar a sustituirla en el momento con la asistencia en carretera del RACE.
El motor de arranque
Dentro de este apartado, hay que diferenciar entre:
- La instalación eléctrica falla: los cables de un fusible, una clema, un enchufe o un relé pueden tener una mala conexión y esto provoca que las piezas no realicen bien su función.
- Fallos en los componentes eléctricos: en este caso, la electricidad llega correctamente, pero son los propios componentes los que dan algún fallo: un sensor, un captador, un actuador, una bobina… Como ejemplo, Llorente pone el caso del componente eléctrico más común por el que un coche no se suele poner en marcha, que es el captador del cigüeñal. Éste indica a la centralita en qué posición está el motor para que así pueda empezar a funcionar.
- Fallo en las centralitas: aunque la electricidad llegue y los componentes eléctricos funcionen correctamente, son las centralitas del coche las que pueden dar algún error. Si fallan las centralitas de inyección o de motor, el vehículo no se pondrá en marcha.
Tu coche no arranca por un fallo en la alimentación del combustible
Sin gasolina o gasóleo para quemar, un coche con motor térmico no podría empezar a desplazarse. A partir de aquí, el tema del combustible es muy amplio. Algunos de los fallos más comunes que te puedes encontrar son:
Inyectores
Son los encargados de dejar pasar el combustible justo para que se produzca una correcta explosión o compresión dentro del motor. Son más comunes los fallos de estas piezas en los coches diésel que en los gasolina, y su mal funcionamiento puede provocar que directamente el coche no pueda ponerse en marcha por falta de combustible en la cámara de combustión. Puedes leer más sobre los problemas con los inyectores en este artículo.
Bomba de alta presión y de trasiego
Casi todos los motores, tanto los de gasolina como los diésel, llevan en la actualidad una bomba de alta presión. Aunque hayas repostado un combustible u otro en el depósito, si esa bomba de trasiego no funciona correctamente al no enviar el combustible con la suficiente presión al motor, luego no se podrá inyectar el combustible para que se produzca la mezcla, así que también es una pieza fundamental dentro del circuito de alimentación.
Otras razones por las que tu coche no arranca
Mi coche no arranca y no hace ruido
Mariano Suárez Martín, asesor técnico del RACE, explica que cuando un coche no arranca y no hace ningún tipo de ruido, lo normal es que la batería esté descargada. No obstante, si el coche no arranca y no hace ruido, aunque sí se encienden las luces del cuadro de instrumentos, puede deberse a varios motivos:
- El inmovilizador no permite encender el coche. Es un sistema que no permite activar el motor para evitar un posible robo. Esto ocurre, por ejemplo, si la llave del coche se ha descodificado.
- Los inhibidores de frecuencia de las comisarías y edificios estatales que bloquean los transpondedores de las llaves. En esta ocasión, no es que el coche no arranque, sino que tampoco puedes llegar a abrir el coche con el mando de la llave y lo tienes que hacer de forma manual introduciendo el espadín.
- Motor de arranque. Si no recibe la energía suficiente el motor de arranque no va a poder actuar sobre el motor y, por tanto, no se va a activar. Este problema es diferente al sonido de un claqueteo o un ruido metálico al arrancar el coche cuando giras la llave en el contacto. Si esto ocurre, el motor de arranque recibe algo de energía de la batería, pero no la suficiente para poner en marcha el propulsor.
Códigos de llave o sistemas de seguridad antirrobo
En la actualidad, desde los coches más simples hasta los más sofisticados llevan un sistema de seguridad en la llave.
- Coches más sencillos: la llave se comunica con el coche a través de un lector de códigos cuando la introducimos y se acciona el bombín de arranque. Si éste se estropea, no podrás llegar a arrancar el motor.
- Coches más modernos: sólo hay que llevar la llave en el bolsillo. El mando y el coche se comunican a través de un código de arranque enviado a través de ondas. Si el mando no tiene pilas o estás en una zona con inhibidores, el coche no arrancará.
Roturas y desgastes mecánicos
No hay que olvidar tampoco que la parte mecánica tiene una vida útil que se acaba por desgaste o por desajustes en sus piezas. Este problema suele aparecer en vehículos con muchos años y miles de kilómetros bajo su capó.
Algunas averías de este tipo se deben al desajuste de las válvulas, al desgaste en el árbol de levas, a que los segmentos de los pistones estén desgastados y no hacen una compresión correcta… Todos estos fallos pueden provocar que a tu coche le cueste arrancar o que directamente no lo haga.
Falta de mantenimiento
En el RACE insistimos en la importancia de llevar el mantenimiento del coche al día según lo que recomienda el fabricante.
Que el coche no arranque por el mal estado de las bujías, porque se rompa la correa de distribución o porque los filtros del combustible o del aire estén saturados son una señal clara de que no revisas el coche cuando toca. Para evitarlo, puedes llevar tu coche a cualquiera de los talleres Eurekar con la garantía del RACE.
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